Y ahí estabas perdido
eras un ovillo temblando en el asfalto
te cogí la mano
y nos fuimos por el milagro de vivir
rápidos como dos soledades prófugas
y no paramos hasta que el tiempo detuvo su aguja.
Y ahí estaba yo perdida
era un ovillo temblando ante tu palidez
cogí tu mano
pero ya no estabas para mí
y me fui con esta soledad rotunda
y no he parado de recorrer el asfalto gris
donde una vez la plenitud floreció .
Y ahí se quedan las horas
vestidas de riguroso silencio
haciéndose eco de este corazón desgranado
donde una vez el labio fue pájaro multicolor
y el cual nunca más el paréntesis de la sonrisa abrió.
Lichazul © Elisa
13 comentarios:
La plenitud tiene fecha de caducidad.
Después viene el doloroso declive.
Besos.
Qué ingratitud!!! queda abierta la oportunidad para que otro corazón ilumine de nuevo ese asfalto.
Abrazos!!!
"...donde una vez el labio fue pájaro multicolor..."
Si el poema me gusta muchísimo, de este verso que he quedado prendada, poeta.
Lo leo y vuelvo a leer y en cada lectura me llega más.
Un abrazo inmenso!!!
Y ese corazón volverá a ser pájaro multicolor , no te preocupes Elisa, besos.
Qué lindo, Elisa.
Me encanta.y me lleva a un tiempo y a un lugar lejanos...
Besos
Cuánto nos perdemos por el no entendimiento, por el desamor.
Pero la vida sigue y uno aprende a caminar sin rencor esperando otros labios que nos merezcan.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
muchas gracias por sus palabras
abrazos y feliz semana
Caminamos por el asfalto de la vida ovillados o desenredando ovillos...Quizá lo más importante es la intensidad de ese instante vivido,que nos redime,después,de la soledad...y el silencio.
Mi gratitud por tus excelentes poemas,Elisa.
Mi abrazo inmenso y feliz semana.
M.Jesús
ayyysss, te asaltaron los recuerdos, al menos te dejaron estos hermosos versos.
un abrazo
Eres muy GRANDE Elisa.
besito para ti.
Quizás fue un encuentro equivocado, quizás nunca existió, (o sí), pero aquí esta, ahora, en estos versos.
Un abrazo.
abrazos y energías a cada uno
gracias
Huir sin mirar atrás, de todo...pero la mano está vacía, como el asfalto de la carretera de la soledad, y queda el recuerdo...Excelente un abrazo.
Publicar un comentario